El pasado 18 de mayo el Gobernador de Texas dio una conferencia de prensa en la que menciono que se permitirá abrir a los restaurantes a un 50% de su capacidad mientras que a los bares se les permitirá abrir a un 25% de su capacidad. La noticia ha sido recibida con opiniones divididas, sin embargo los restaurantes y bares están tomando las medidas necesarias para recibir a los clientes con precauciones.